El domingo 30 de abril se celebró la XVI edición de la maratón Orbea Monegros que en esta ocasión contó con 8.000 participantes
La prueba discurre por los parajes monegrinos de los municipios de Albalatillo, Sena, Villanueva de Sijena, Castejón de Monegros, Valfarta, Peñalba y Sariñena
Ciclistas de la carrera larga de 118 kilómetros con dorsal amarillo
El cierzo estuvo presente durante toda la jornada con rachas de hasta 75 kilómetros por hora, lo que hizo que la prueba resultara algo más pesada que en anteriores ediciones. Un gran desafío para los sufridos aventureros
El fuerte viento originó numerosas caídas, afortunadamente sin mayores consecuencias
Ciclistas de la carrera corta de 82 kilómetros con dorsal rosa
Hacia la sierra
Llegando a la ermita de San Miguel
Aunque en esta edición el gran protagonista fue el viento, tampoco faltaron el polvo y el barro
Debido al fuerte viento y por razones de seguridad, la organización decidió adelantar el cierre de la maratón y alrededor de 1.800 corredores inscritos en el circuito largo fueron desviados al circuito corto a unos 70 kilómetros de la meta
Ya falta menos
A por el tramo final
Según informa el periódico digital Desde Monegros, los primeros participantes en completar el recorrido necesitaron más de cuatro horas para cubrir los 118 kilómetros de la gran maratón. Al sprint, después de rodar juntos durante casi todo el trazado, Ricardo Catalán, Joan Llordella, Roger Argelager y Milton Ramos fueron los primeros en llegar a la meta.
Los laureles fueron para Catalán, de Zaragoza, que venció en su primera participación con un crono de 4 horas y 11 minutos. A su llegada destacó el gran ambiente de la prueba así como el esfuerzo de la organización.
En la media maratón de 82 kilómetros, el ganador fue Arturo Martínez, de Ripollet (Barcelona), que también alabo la belleza del recorrido que discurre por parajes "áridos e inóspitos". En su caso, aun reconociendo su dureza, mostró su satisfacción por el fuerte viento, pues considera que el ciclismo requiere de "esas dosis de sufrimiento".
Este año la Orbea Monegros tuvo un participante de excepción, el pentacampeón del Tour de Francia Miguel Indurain, que encabezó la salida de la carrera. En sus declaraciones mostró su satisfacción por el ambiente vivido, reconociendo que se trata de una prueba asociada a la aventura y que este tipo de eventos son fundamentales para fomentar el deporte y el turismo con amigos y en familia.